Lacalle Pou, al horno: necesita 89 millones de dólares extra para financiamiento debido al déficit fiscal
El Gobierno de Luis Lacalle Pou actualizó las necesidades de financiamiento de Uruguay para el 2023 en un 2,11 por ciento al alza, según el último reporte de deuda publicado por la Unidad de Gestión de Deuda (UGD) del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF).
Las necesidades de fondeo para este año se revisaron al alza, pasando del monto original que se había estimado en febrero de 4.210 millones de dólares a un nuevo total de 4.299 millones de dólares. Esto significa un aumento de 89 millones de dólares respecto a lo proyectado en febrero pasado.
representa el 46,5 por ciento de las necesidades de endeudamiento (unos 1.999 millones de dólares), mientras que las amortizaciones representan 52,9 por ciento del total (unos 2.274 millones de dólares). El monto restante refleja la acumulación prevista de activos financieros del Gobierno”, dice el reporte.
En este sentido, es posible advertir que el ajuste de las necesidades de financiamiento se da en un contexto de aumento del déficit fiscal: en febrero había sido del 3,4 por ciento, mientras que en marzo y abril se mantuvo en un 3,6 por ciento.
Por otro lado, el documento de la UGD da cuenta de que el Endeudamiento Neto del Gobierno (ENG) proyectado, derivado del programa financiero es de 1.939 millones de dólares, aumentando respecto a la estimación previa de 1.893 millones. Para el 2023, el tope legal del ENG se ubica en 2.200 millones de dólares.
Asimismo, la emisión de bonos se mantiene como la principal fuente de financiamiento, tanto en el mercado doméstico como en el internacional; y se proyecta en 3.825 millones de dólares. En tanto, los desembolsos de préstamos con organismos multilaterales se estima en 396 millones de dólares este año.
Al cierre del primer trimestre de 2023, el stock de deuda bruta del Gobierno Central se estimó en 57,6 por ciento del Producto Bruto Interno (PBI), aumentando 0,2 puntos porcentuales del PBI en comparación con el cierre de 2022. Por otro lado, la deuda neta estimada era de 54,3 por ciento del PBI, implicando un aumento de 1 punto porcentual en comparación con el cierre del año 2022.
Además, la proporción de deuda en moneda local en el total del portafolio, continuó incrementándose, alcanzando a 55 por ciento del total —casi igual al 55,3 por ciento que se alcanzó a fines del año 2012, la mayor proporción de deuda en moneda nacional obtenido. Esto se explica por la estrategia de gestión de deuda que lleva adelante el gobierno, cuyo objetivo es lograr que la mayor parte de la deuda sea en moneda local y, así, evitar un efecto arrastre de posibles desequilibrios en los mercados internacionales y con el tipo de cambio.