Para ello, el director general de los Servicios Ganaderos, Diego De Freitas, viajará rumbo a México para acelerar el proceso de compra de este insumo de prevención. Al respecto, el gobierno dispuso la compra de 10 millones de dosis, con el objetivo de aplicar un esquema de doble vacunación lo antes posible frente a la “amenaza epidemiológica” en que se convirtió la Influenza Aviar H1N5.

Frente a esta medida, CUPRA expresó que tiene que haber medidas complementarias “para no poner en riesgo el proyecto de modernización del rubro, sus expectativas de exportación, ni generar situaciones ambiguas a los productores”.

¿Qué medidas propone CUPRA?

La principal medida que propuso CUPRA fue la creación de una entidad parecida al Grupo Asesor Científico Honorario (GACH) donde se involucran científicos de la Agencia Nacional de Investigación e Innovación (ANII), “para enriquecer el conocimiento y seguir la evolución de la epidemia global, asesorando a los actores públicos y privados”.

Por otro lado, reclamaron que el gobierno debe dedicar sus mayores esfuerzos “para resolver los problemas de informalidad y bioseguridad asociados en un amplio número de granjas de postura”. Esto se relaciona con una necesidad de que el país invierta en sector avícola. “La avicultura nacional requiere que el país invierta como lo hizo y lo hace para la carne bovina, en el desarrollo de conocimiento y en el aporte de los mejores científicos con que podamos contar para que demos pasos firmes y seguros en la estrategia de desarrollo del sector acordada con el gobierno”, dijo el presidente de CUPRA, Domingo Estévez.

Actualmente el sector cuenta apenas con un 7 por ciento de los mercados potenciales abiertos y son todos de baja exigencia; por lo tanto, de bajo valor. A modo de referencia en el caso de la carne vacuna, Uruguay cuenta con más del 75 por ciento de los mercados del mundo habilitados. En este sentido, en mayo un representante de CUPRA participará de una misión oficial del país a China, Hong Kong y Macao.